España está peor cada día, así el Gobierno del Partido Popular
quiera mimetizar su desgracia y decadencia. Pobre y con razones. Un país que pierde
sus servicios básicos, la salud, la educación,
el empleo, la vivienda y se recorta en políticas sociales. Por lo menos 14.885
millones de euros, equivalente al 1,5% del PIB, se han evaporado de las cuentas
de las Administraciones central y autonómicas desde 2010 —y eso sin incluir los
presupuestos autonómicos de 2013 en sanidad, ni el recorte total en servicios
sociales— según la estimación elaborada por un grupo de comunicación.
Y que para desdicha, cada día se
confirma como uno de los países más corruptos del mundo, quizá comparado con
Repúblicas latinoamericanas, paraísos africanos o asiáticos. España es el
segundo país del mundo en el que más ha aumentado la percepción de corrupción
este año, por detrás tan sólo de Siria, según un informe de la ONG alemana Transparencia Internacional (TI).
La clase política en general no
ha sabido interpretar la situación ni
comprender la realidad de sus ciudadanos. Crisis de partidos, de políticas y de
gobernantes. Vivimos en un país arrodillado a las políticas neoliberales y a
los mandatos de la privatización y la austeridad, mientras la sociedad se descompone. Huyen sus jóvenes, cada día hay
más pobreza y exclusión, lo peor, los
niños son más pobres y hambrientos. La tasa de pobreza infantil para menores de
16 años es del 26,7%, seis puntos por encima del conjunto de la población. Están
en riesgo de pobreza las personas que viven en hogares con una renta inferior
al 60 % de la mediana de la renta nacional equivalente.
En España hay cerca de 13
millones de personas en riesgo de pobreza o exclusión social, concretamente
12.866.431 personas. Son prácticamente uno de cada tres ciudadanos (el 27,3% de
la población). Según la Red Europea de Luchacontra la Pobreza y la Exclusión Social, que ha publicado un informe sobre
la evolución de la vulnerabilidad social entre los años 2009 y 2013, la etapa
central de la crisis económica, a partir de datos oficiales (fundamentalmente
el INE). De ellos, hay 9,6 millones de pobres y 2,8 millones de personas con
una severa falta de recursos.
Paradojas de la vida o el
negocio, los ricos son más ricos, los bancos se llenan las arcas, la impunidad
ronda cada día y los medios de
comunicación viven una cruenta lucha de márquetin e ideologías. En estos años de
mandato del Gobierno del PP en España, vemos una sociedad que se diluye y demuele sin que nadie haga
nada. Ni los artistas, ni los escritores y ni los intelectuales. Había que
releer el artículo de Vargas Llosa defendiendo las políticas de derecha y
neoliberales del gobierno actual. Mostrándonos que el pecado viene de la
izquierda y la redención de la derecha. Falacia informativa de un mito que aunque
es genio no deja de ofender. Menos mal que las excepciones aunque contadas existen por el bien de la gente.
Para colmo de males, cada día
conocemos algo más retorcido de la clase dirigente, empresarial y personajes de
la vida nacional e internacional. Esta semana se ha publicado la famosa lista Falciani, un compendio de
nombres y cantidades de evasores en el mundo. Todo un repertorio a la locura y su ambición desenfrenada. 1.500 nombres, de evasores que serán mucho más.
Mientras el ciudadano de a pie se pregunta por qué él, sí paga los servicios y
los impuestos, mientras otros buscan la trampa y el desfalco. Pobre ingenuo.
Una investigación que apenas empieza a destaparse y que seguro dará de qué
hablar. El problema es qué hará la justicia y si de verdad se castigará a los
culpables o será otro bulo informativo para llenar portadas. (Véase caso Bárcenas,Operación
Púnica, Gürtel, Eres y un largo etcétera.
Una sociedad que no protege a sus
niños debería ser denostada. España es uno de los países de la Unión Europea en
los que más ha crecido la pobreza infantil desde el inicio de la crisis
económica con una subida del 45% entre 2007 y 2009, según un estudio del
Observatorio Social de España (OSE) y la Universidad Pompeu Fabra. La ONG Save
the Children ha cifrado en unos 2.226.000 (27,2 %) los niños que viven en
España por debajo del umbral de la pobreza.
Aunque el crecimiento del riesgo
de pobreza y exclusión se ralentizó desde 2010 y en 2013 sólo creció un 0,1%,
la EAPN descarta que tenga que ver con una mejora de la situación: "Se
explica como un mero efecto estadístico causado por la reducción de ingresos en
amplias capas de la población --baja el umbral de pobreza--, a lo que debe
añadirse que el retorno de inmigrantes pobres a sus países de origen",
explica el informe.
España es hoy un cadáver que
necesita renacer de sus cenizas. Que requiere un cambio de timón y por eso no
extraña que las últimas encuestas sitúen a Podemos como primera opción. Aunque
no tengan experiencia y sean carne de cañón de la derecha mediática, puede ser
un revulsivo que mejore un poco la paupérrima sociedad española. Eso sí, mucho
tendrá que mejorar su mensaje porque no basta con su “Tic tac” para que la
gente le siga en su proyecto. No se conoce hasta el momento un sistema perfecto
de vida y menos de política, lo que no se puede tolerar es que unos pisoteen a
otros por el dinero, el interés o los beneficios propios. El ejemplo lo ha dado
Grecia, 300 mil ciudadanos tendrá luz y calefacción gratis y un cambio en sus
políticas de austeridad aunque le cueste jugársela ante la troika europea.
España debe recuperarse a sí misma y dejar de ser la pobre que enriquece a unos
cuantos.
Rafa Cely
Divulgador Multimedia
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen
Ánimate y escribe lo que quieras con respeto y libertad. Sacar afuera lo que tienes dentro como la primavera.